Tuesday, August 16, 2011

Puntarena

Puntarena
Tuesday, August 16, 2011 | Por Miguel Iturria Savón

LA HABANA, Cuba, agosto (www.cubanet.org) – El hotel Puntarena, situado
al lado de la Dársena de Varadero, entre la Avenida Kawama y Final,
sorprende en verano a los turistas europeos que buscan las arenas
blancas del gran balneario de Cuba, trasmutadas por arenillas grises de
mayor grosor, en sintonía con el predominio numérico de los cubanos y
con la excelencia de los servicios ofrecida por los empleados, quienes
no piden propina, pero esperan, pues con "todo incluido" no entran en
contacto con la divisa salvo alguna propina personal.

Ubicado en la primera línea de playa, entre palmeras y cocoteros, cerca
de la entrada de Varadero, de cuyo aeropuerto internacional dista 25
kilómetros, el Puntarena dispone de 225 habitaciones, 150 de ellas
consideradas estándar, 108 comunicadas entre sí, 101 dobles y cuatro
suites; todas con aire acondicionado, baño, balcón, teléfono, televisión
por satélite, caja fuerte, mini-refrigerador y secador de cabello; en
armonía con la decoración general basada en cristales, plantas
ornamentales y muebles, mas la red de servicios previstos en el contrato
firmado en hoteles o agencias de La Habana y otras ciudades, o en las
representaciones de Cubatur en el extranjero.

Los servicios parecen de primera pues el hotel, cuatro estrellas en
espera de reparación, conserva toda su infraestructura en
funcionamiento, lo cual beneficia a muchos, aunque se nota la involución
física en áreas exteriores. A los extranjeros –cuatro chinos, seis
españoles, tres italianos, dos mexicanos y algún alemán- les advierten
las insuficiencias en La Habana. Si se quejan, es del bullicio de los
huéspedes nativos, quienes tiran los desperdicios en la arena a pesar de
los cestos de basura, además de "comer como alemanes" y gozar del mar,
los bares y la piscina hasta el último minuto.

El hotel cuenta con los restaurantes El Dragón de Oro, especializado en
comida internacional, y La Costa, caracterizado por la culinaria
italiana, previa reservación dependiendo de la disponibilidad; más el
Buffet Horizontes para desayuno, almuerzo y cena; los bares El Ranchón,
La Cascada -24 horas-, Náutico y Arcoíris; la discoteca La Salsa y el
snack bar Take Away,

Los espacios gastronómicos convergen con la piscina para niños y
adultos, las actividades de animación, la sala de juegos, guardería
infantil, billar, ping pong, aqua bike, catamarán, snorking, kayak,
windsurfing, motocicletas y áreas de voleibol, competencias, club house,
show, desfile de modas, gimnasio, sauna, minigolf, sombrillas de playa,
casa de cambio y parqueo, no todos funcionando.

Entre los servicios adicionales encontramos la tienda de regalos,
telefonía, internet, la atención médica, masajes y peluquería, la renta
de autos, el bus para recorrer Varadero y el buró de turismo que ofrece
paquete de bodas, check in privado, cocktail de bienvenida, suite o
habitación con vista al mar, bebidas y cena romántica en el restaurante
internacional.

El Puntarena no resalta por su arquitectura, de fines de los 80 o
principios de los 90, ni por la arena blanca que atrae a los turistas
europeos, sino por su ubicación frente a la Dársena de Varadero, ese
canal de antaño que apenas tiene embarcaciones.

http://www.cubanet.org/articulos/puntarena/

No comments:

Post a Comment