La historia que complace al castrismo
[16-03-2015 13:32:50]
Orlando Freire Santana
(www.miscelaneasdecuba.net).- Para nadie es un secreto la importancia
que los gobernantes cubanos le conceden a la enseñanza de la Historia de
Cuba en todos los niveles del sistema nacional de educación. Por
supuesto, no se trata de una Historia objetiva que se acerque
verídicamente al pasado, sino de una interpretación del ayer que
justifique el actual régimen político de la isla.
En ese contexto, las autoridades educacionales han desechado casi toda
la historiografía surgida antes de 1959, acusándola de ser un mero
compendio de hechología burguesa. Valiosos textos de historiadores como
Fernando Portuondo, Herminio Portell Vilá y Emeterio Santovenia, entre
otros, languidecen en oscuros anaqueles, o sus páginas se convirtieron
en materia prima para la industria.
Entonces, después de mucho peregrinar durante más de medio siglo en pos
de hallar una Historia que “formara adecuadamente” a la juventud
cubana--- incluyendo el penoso período de los manuales soviéticos---, el
castrismo parece haber encontrado al autor y los libros indicados. Nos
referimos al abogado e historiador Ernesto Limia, quien prepara una
serie de cuatro textos que pretenden abarcar los cinco siglos de nuestro
devenir histórico.
Los dos primeros libros: “Cuba entre tres imperios: perla, llave y
antemural (1492-1767)”, y “Cuba Libre: la utopía secuestrada
(1767-1899)”, ya fueron publicados. El tercer título “Cuba irredenta: la
gran rebelión (1899-1959)” está en fase de escritura. El último libro,
sobre el cual el autor solo puede adelantar el proyecto, tratará acerca
del período de la revolución castrista.
Sobre los libros ya publicados han emitido comentarios favorables
importantes figuras de la intelectualidad oficialista, como Fernando
Martínez Heredia, Abel Prieto y Miguel Barnet. El primero fue quien
propuso las obras de Limia como libros de texto de la enseñanza media
superior, y de las carreras universitarias donde se enseña la Historia
de Cuba. Abel y Barnet, por su parte, se encargan de presentar--- y
promover--- esos textos en ferias del libro y otros espacios culturales.
Pero dejemos que sea el propio Ernesto Limia, en declaraciones al
periódico Juventud Rebelde (edición del domingo 8 de marzo), quien
aclare las características de sus libros: “Se trata de analizar el largo
camino de crecimiento de la nación, y el surgimiento y desarrollo de las
relaciones con Estados Unidos, desde una mirada que abarque las
dimensiones socio-económica, educativa, cultural, militar, política y
las relaciones exteriores del país en el contexto geopolítico global”.
A buen entendedor, con pocas palabras bastan. El señor Limia centra su
historia en el diferendo Cuba-Estados Unidos. De esa forma se trata de
validar el discurso político de los gobernantes cubanos, quienes
esgrimen el conflicto con Washington como fuente para adquirir legitimidad.
Ah, pero los ideólogos del castrismo no pueden olvidar un detalle
importante: hay que cambiar los muñequitos de Elpidio Valdés. Porque,
claro, esos muñequitos tratan, en lo fundamental, del enfrentamiento
entre los mambises cubanos y los colonialistas españoles. Ahora habrá
que inventar, cuanto antes, unos episodios en que los cubanos se fajen
contra los yanquis. Para semejante empeño siempre aparecerán los
recursos materiales, pues las dificultades que impone el “bloqueo” de
Estados Unidos son un cuento para embaucar a los incautos.
Source: La historia que complace al castrismo - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/5506cd723a682e122c08674e#.VQcEKI7F9HE
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