Sacando provecho del dolor ajeno II parte

Sacando provecho del dolor ajeno II parte
[08-09-2014 10:25:04]
Angélica Mora
New York

(www.miscelaneasdecuba.net).- AMANECER HABANERO. Frank E.
Carranza. Siguen perdiéndose de forma misteriosa los insumos de trabajo
para los carros del servicio fúnebre, para los de Ciudad Habana y viajes
al interior del país.
Al parecer la empresa de servicios necrológicos continúa siendo el
negocio más lucrativo en la actualidad. Tan lucrativo, que aun bajo
auditoría de la Contraloría de la República de Cuba, continúan el robo,
desvío de recursos y estafa a sus trabajadores.

Siguen perdiéndose de forma misteriosa los insumos de trabajo para los
carros del servicio fúnebre, para los de Ciudad Habana y viajes al
interior del país.

Se fugan neumáticos de repuesto, baterías y partes de los autos como
guardafangos y puertas. A esto se suman las irregularidades de autos
fúnebres circulando con la licencia operativa y tarjeta de circulación
de otros vehículos.

La falta de carros fúnebres es alarmante, aun así se retiró un coche
fúnebre del servicio para usarlo como grúa de mantenimiento ya que la
scatulina encargada de esto se encuentra parada sin motor.

Se compró uno para la misma, y aún los mecánicos no saben para qué auto
es, de lo que están seguros es que no es para la scatulina.

Todo aquel que le lleve la contraria a la directora de la empresa, la
señora Lizet Brito y la subdirectora económica Carmen Rosa, se va de la
misma. Estas dos señoras controlan conjuntamente con el jefe de
mecanización todo el descontrol de esta empresa, según hemos podido
constatar con nuestras fuentes las cuales prefieren quedar en el
anonimato. Hay falta de pago por horas extras e irregularidades en el
sistema de pago de las dietas para los choferes que realizan viajes a
provincias.

A estos se les paga 8 pesos diarios.

Lo estipulado es 140, 10 merienda 30 almuerzo, 30 comida y 70 hospedaje.
Desde el mes de junio no están pagando a estos choferes, ni siquiera los
8 pesos. A esto se le puede sumar la mala alimentación de los
trabajadores. En estos momentos una auditoria de la Contraloría General
de la República de Cuba está en escena.

El despacho de la directora de la empresa, la señora Lizet, se encuentra
cerrado por los auditores para impedir que se saquen documentos. La
oficina cuenta con cuatro consolas de aire acondicionado de una tonelada
cada uno. En las funerarias no hay ni ventiladores.

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