El feminismo cubano: un tema borrado

El feminismo cubano: un tema borrado
Lunes, 18 de Junio de 2012 03:37
Escrito por Lucas Garve

feminismoCuba actualidad, Mantilla, La Habana, (PD) En el espacio de la
historia política de Cuba, el feminismo, caracterizado por un alto nivel
de sufragismo y su lugar en el desarrollo de la civilidad y las
relaciones sociales nacionales en el siglo XX cubano, ha sido objeto de
manipulación durante estos cincuenta y tres años de régimen comunista.

Sin embargo, es válido apuntar que, al ser escrito el relato de la
Nación casi totalmente por hombres, el papel de la mujer se vio desde
siempre soslayado.

Así resulta en las sucesivas redacciones de la historia de Cuba que han
recogido los eventos político-militares de las guerras de independencia
y otras contingencias en la era republicana, la mención de
individualidades femeninas ha sido punto obligado para quedar bien con
las mujeres, pero con el objetivo de alinearlas políticamente a una
tendencia ideológica u otra.

De hecho, no destacan el papel de la mujer cubana como gestora de
valores cívicos y de convivencia social ni como defensora y promotora de
derechos cívicos y económicos. Por ejemplo, en los relatos de las gestas
independentistas del siglo XIX cubano solamente se destaca la relación
familiar de ciertas mujeres vinculadas a hombres destacados en la
formación del nacionalismo cubano, mientras soslayan la existencia de un
discurso femenino que además estuvo presente en algo más de dos decenas
de publicaciones periódicas a partir de 1860.

¿Mariana Grajales o Amalia Simoni solamente se distinguen por unas
frases convertidas en estereotipos en los anales históricos cubanos? ¿Se
ha investigado a profundidad el pensamiento de ellas y de otras cubanas
en el desarrollo de la historia política nacional? ¿Las mujeres cubanas
protagonistas en las guerras de independencia sólo merecen mención por
su vínculo familiar con los líderes cubanos de la época?

Después de 1959, la revisión ideologizada de la historia política cubana
acudió a la variable de "clase social" para obviar el aporte de las
mujeres cubanas en la misma y las encasilló simplemente en burguesas y
proletarias.

Si vamos a reexaminar el relato de la Nación con el objetivo de rescatar
y ofrecer una visión renovadora de la sociedad cubana, tendríamos que
reconocer primeramente que el feminismo a la cubana jugó un papel
revolucionario que permitió que en los primeros decenios de la República
se promulgaran leyes como La Ley de la Patria Potestad (1917), La Ley
del Divorcio (1918) y la Ley del Sufragio Femenino (1934), mucho antes
que en la mayoría de países latinoamericanos.

La significación del feminismo en Cuba y su variable sufragista va más
allá del hecho exclusivamente vindicativo. Este creó y estructuró una
filosofía para las mujeres que hizo posible que ganaran un espacio en
una sociedad patriarcal, machista, aún con rasgos coloniales.

Aunque en Cuba se cuente con fuentes bibliográficas abundantes sobre el
tema, han corrido la triste suerte de ser soslayadas, sobre todo las
escritas entre los años 1915 y 1934 por autores como Francisco Caraballo
Sotolongo, Francisco Ponte, Alfredo Zayas, Víctor Suárez Chamizo, Arturo
Montori, Raimundo Lazo, Camila Henríquez Ureña, Ofelia Domínguez
Navarro, Hortensia Lamar, Dulce María Borrero y quien sería una de las
divulgadoras y defensoras del feminismo sufragista cubano y de la mujer
cubana, la periodista Mariblanca Sabas Alomá, una de las mujeres que
practicaron más activamente el periodismo en el país en el siglo XX y
hoy una figura olvidada como tantas otras.

No obstante la riqueza de la intervención de la mujer en la historia
política de la Nación cubana en el siglo XX, en los libros de Historia
de Cuba publicados en los cien años de República, esta no se analiza con
profundidad y exclusivamente se destacan los méritos políticos de
identificación partidista de estas.

Muy poco o nada conocen las generaciones menores de 50 años. La
propaganda oficial del régimen insiste en difundir que las mujeres
cubanas no tenían instrucción, ni espacio, y menos aún mencionan las
leyes logradas a su efecto y presentan a la Federación de Mujeres
Cubanas como la única agrupación representante de la mujer en el relato
nacional.

Falta por dar a conocer en profundidad este relato particular de la
mujer cubana a las propias mujeres para que se incorporen al proceso de
empoderamiento cívico necesario para sacar adelante a la sociedad cubana
y desterrar para siempre el totalitarismo y las tendencias nocivas que
este ha inoculado en la ciudadanía.

Para Cuba actualidad: garvecu@yahoo.com

http://primaveradigital.org/primavera/cuba-sociedad/sociedad/4348-el-feminismo-cubano-un-tema-borrado.html