Sin el golpe de estado del 10 de marzo de 1952 no habría revolución castrista

Sin el golpe de estado del 10 de marzo de 1952 no habría revolución
castrista
enero 5, 2016 12:00 pm

Cerro, La Habana, Rogelio Travieso, (PD) Sin el golpe de estado dado por
Batista el 10 de marzo de 1952 no habría existido la revolución de Fidel
Castro.

¿Cuál ha sido el resultado de esa revolución? 57 años carentes de
libertad, pletóricos de desengaños, muertes, separación familiar, tiempo
perdido, adoctrinamiento, censura. Ha habido enfrentamientos entre
cubanos, millares de presos políticos, conflictos familiares. Los
cubanos se han visto forzados a participar en guerras en países
africanos, en defensa de dictadores y ladrones. Hoy, una apreciable
cantidad de personas, jóvenes en su mayoría, no quieren vivir en Cuba.

¿Para qué fueron todos los sacrificios?

No hay justificación en seguir afirmados en los mismos errores.

Recientemente, el jefe de estado Raúl Castro expresó: "No se puede dejar
terreno al derrotismo".

¿Acaso con tantos fracasos y tiempo perdido de nuestras vidas podemos
ser optimistas? No es derrotismo. El sistema fue derrotado por la falta
de libertades. La causa principal de nuestra tragedia es la ausencia de
libertad política, económica y social. Pero el régimen persiste en su
error de controlarlo todo.

Los cubanos que desde 1959 y hasta hoy se fueron a los Estados Unidos,
principalmente al estado de la Florida, son prósperos. Los que quedaron
aquí en Cuba viven miserablemente.

El cubano es emprendedor en todas partes del mundo, menos en Cuba.

El Estado es para gobernar, no para administrar.

En las naciones hay que convivir con todas las ideas, no solo con las de
unos pocos, y menos con una línea impuesta que demostró ser errónea,
trazada por un solo partido.

Los políticos en otros países, lo más que pueden permanecer en el poder,
es 4, 6, 8 o 12 años. ¿Cuánto tiempo necesita un gobierno para mejorar
la vida de su pueblo?

El 18 de diciembre de 1956, en Cinco Palmas, los rebeldes liderados por
Fidel Castro lograron reunir siete fusiles. 60 años después, pienso que
esos siete fusiles, hubiera sido preferible que se encasquillaran y así
no habrían contribuido a esto que tenemos.

Si otros luchadores contra aquella dictadura, hubiesen sido los que
lideraron el triunfo, quizás habrían sido más respetuosos con la
libertad de los demás.

Han transcurridos demasiados años, para tener que escuchar las mismas
historias. Los resultados obtenidos mataron la confianza y las
esperanzas que existieron.

Aquellos ideales de libertad y reinstauración de la Constitución de 1940
no resultaron.

El poder detentado por tantos años les convirtió en poco humildes.

¡Humilde es Cuba! La miseria se apoderó de ella.

El generalato, las máximas instancias del Partido Comunista, el estado o
el Gobierno, nunca han sufrido y sentido las penurias que padece el
pueblo como resultado de ese poder de 57 años. Un poder sin
contrapartida que los obligue a rendir cuenta y cumplir eficientemente
su mandato. De lo contrario, si hubieran vivido y sufrido como la gran
mayoría del pueblo, asaltarían otro cuartel e intimidarían a la nación
con sus métodos violentos de lucha y sus actos de terrorismo. Lo
hicieron por mucho menos, porque la dictadura de Batista duro solo siete
años.

¡Cuánta razón tenía Martí!: "Todo poder amplia y prolongadamente
ejercido, degenera en casta".

Batista y sus golpistas, comprendieron que el pueblo cubano no los
quería y se marcharon el 31 de diciembre de 1958. Los que triunfaron el
primero de enero de 1959, no se apiadan del cubano, e insisten en
continuar imponiendo este engendro de sistema, totalmente carente de
libertades.

Como cubano, exhorto: No sean derrotistas, que salgan los privilegiados
de sus repartos exclusivos y mansiones, monten en sus autos, que son
solo para unos pocos, y lleguen a los barrios del Cerro, Diez de
Octubre, Centro Habana, San Miguel del Padrón u otros lugares de Cuba, y
observen el entorno deprimente lleno de basura, pestilencia, calles,
aceras y viviendas en ruinas, destrucción por doquier. Observen los
rostros de los cubanos en esta época del año, que en cualquier lugar del
mundo es de celebraciones. En los rostros cubanos, solo verán tristeza,
desesperanza incertidumbre. El derrotismo está sobradamente justificado.
Ha convertido a muchos cubanos en borrachos, con alcohol de bajo costo.
Realicen preguntas a los ciudadanos, como por ejemplo: ¿Cómo ustedes
pueden subsistir, dado los salarios y el alto costo de la vida?

En 1958 un trabajador cubano ganaba como promedio 5 dólares diarios y
una libra de carne de res costaba 40 centavos. Ahora los cubanos
subsisten ganando menos de 25 dólares al mes. El que más gana es un
médico: 40 dólares.

Hoy la libra de carne de res cuesta más de 3 dólares, una libra de
malanga 40 centavos de dólar, una libra de frijoles (negros, colorados,
garbanzos, judías) 80 centavos de dólar, una libra de carne de puerco
casi 2 dólares, etc.

¿Acaso vivir aquí no es algo horrible? ¿Qué más se puede soportar? Todo
va en contra del cubano de a pie. Lo único que queda es resolver entre
todos esta tragedia nacional; o de lo contrario, huir de Cuba, o morir.

No se engañe nadie: si un cubano de a pie logra disipar en algo la
miseria, es gracias a la ayuda de sus familiares que viven fuera de
Cuba, principalmente en el país bloqueador.

Demasiadas veces ha sido demostrado. Nada van a resolver los congresos
del PCC, ni las reuniones del Parlamento. No es un problema de hombres.
Es el sistema. Asfixia porque es antinatural.

Solo con la participación de todos los cubanos, se podrá encontrar
solución a esta gran tragedia. Raúl Castro tiene posibilidades de
contribuir a ello y evitar una crisis nacional peor aún. El año 2016
puede ser el año de esa imprescindible solución.

Decía José Martí que "Patria es equidad, respeto de todas las opiniones
y consuelo al triste".
rotravep@gmail.com; Rogelio Travieso
*Partido liberales de Cuba.

Source: Sin el golpe de estado del 10 de marzo de 1952 no habría
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