Wednesday, January 13, 2016

Bolsillos vacíos para el trabajador cubano

Bolsillos vacíos para el trabajador cubano
A pesar de que el gobierno alardea de un supuesto crecimiento de la economía
miércoles, enero 13, 2016 | Martha Beatriz Roque Cabello

LA HABANA, Cuba.- Al pago que recibe de forma periódica cualquier
trabajador como retribución por cierta actividad productiva, se le
denomina salario. Es lo que define la relación contractual de un
empleador y un empleado. La remuneración salarial es uno de los aspectos
que influye más directamente en la vida diaria de los empleados; para
los dueños además de ser un elemento del costo, es un medio que permite
motivar a los trabajadores. Sin embargo, para estos últimos representa
el nivel de vida que pueden tener.

Con el supuesto fin de hacer cumplir estos postulados, el régimen puso
en vigor la Resolución 17, de abril de 2014 del Ministerio de Trabajo y
Seguridad Social, también para eliminar restricciones administrativas y
estimular el incremento de la productividad del trabajo a partir del
pago por rendimiento. No obstante, durante el tiempo transcurrido no se
han observado resultados positivos de la aplicación de este instrumento
legislativo. Por el contrario, muchas quejas por parte de la clase obrera.

Habría que señalar algunas contradicciones con la realidad que se pueden
constatar al revisar los Resuelvo de esta Resolución. Por ejemplo, el
Quinto establece:

"Para la aplicación de las formas de pago por rendimiento deben
cumplirse los requerimientos siguientes: a) organización del trabajo que
garantice la utilización racional de la fuerza de trabajo; b) existencia
de los registro del cumplimiento de los indicadores y de los resultados
del trabajo y c) control de la calidad del trabajo realizado."

Cualquiera que tenga un poco de conocimiento de lo que sucede en la
economía cubana se puede percatar que nada de esto es factible en la
mayoría de las empresas; porque precisamente lo que conlleva a la falta
de productividad es el descontrol administrativo. A esto hay que
adicionarle la falta de contabilidad, algo que en el lenguaje virtual
del régimen han dado por llamar "contabilidad no confiable".

Pero el colmo se legisla en el Resuelvo Noveno, que incluye la
suspensión del sistema de pago si en una auditoría la entidad recibe la
calificación de Deficiente o Malo. Y es que cada vez que la Contraloría
General de la República emite un comunicado público sobre el final de
cualquier comprobación a empresas estatales, los resultados son
desastrosos, por encima del 80% de los que han sido auditados han sido
calificados de Mal.

Este es el intríngulis que ha hecho de la Resolución algo impopular
entre los trabajadores, porque, por el contrario de lo que se esperaba,
los ha afectado económicamente. Solo por poner un ejemplo, se puede
hacer mención de empleado del Sistema de Investigaciones y Proyectos,
del cual se conoce que cobraba mensualmente unos 2350 pesos y en la
actualidad, después de reestructurado el sistema de pago para implantar
este proceso, percibe entre 225 y 250 pesos.

Al parecer, al firmar esta legislación a la ministra Margarita González
Fernández se le olvidó que existen serios problemas a nivel nacional
para cumplir los planes, por la falta de suministro de materias primas y
materiales, rotura de equipos, inversiones que no maduran y el
burocratismo entre otros elementos que hacen ineficiente el sistema
empresarial y por consiguiente actúan en contra del pago por rendimiento.

No se puede aprobar una Resolución desde un buró, sin conocer lo que
pasa en la base, las entidades no están preparadas para atemperar lo
legislado, porque en cualquier empresa falta mucho desde el punto de
vista organizativo.

Cabe entre otras cosas responsabilizar a los que dirigen el movimiento
obrero, porque no tienen el interés ni el conocimiento de los asuntos
económicos. Esto ha traído como consecuencia, según expresó el
Secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba, en el 98 Pleno
de esta institución, que muchos trabajadores abandonen sus plazas, no
solo por los bajos salarios, sino también por malas condiciones para el
desempeño de sus funciones.

Aunque en la pasada reunión ordinaria del Consejo de Ministros,
efectuada el 19 de diciembre de 2015, la Ministra del ramo defendió con
vehemencia la letra de esta Resolución y aportó argumentos como que en
el primer semestre de ese año la productividad del trabajo se incrementó
en un 30% y el salario medio de los trabajadores ascendió a 696 pesos,
en la práctica nadie ve esto en sus bolsillos y mucho menos en el
incremento del nivel de vida y en las posibilidades de aumentar y
mejorar la canasta familiar.

Por su parte, en esta misma reunión Raúl Castro convirtió el problema en
una situación militar, cuando enfatizó que había que tener exactitud en
el impacto de las medidas de carácter estratégico, porque el salario es
estrategia.

Todo parece indicar que los economistas que han definido el salario,
como por ejemplo Paul A. Samuelson (Premio Nobel de Economía en 1970) y
William D Nordhaus, tienen que reestudiar sus efectos en el nivel de
vida del pueblo para darle el "carácter estratégico" del que habla el
dictador. Y es que de buenas intenciones está lleno el camino hacia el
infierno. Entonces se sigue cumpliendo el refrán popular: "Yo me hago el
que trabajo y tú te haces el que me pagas".

Compartir:


Source: Bolsillos vacíos para el trabajador cubano | Cubanet -
https://www.cubanet.org/opiniones/bolsillos-vacios-para-el-trabajador-cubano/

No comments:

Post a Comment