Saturday, September 12, 2015

Los que mandan no tienen qué ofrecer

Los que mandan no tienen qué ofrecer
septiembre 9, 2015 10:39 am·

El Cerro, La Habana, Rogelio Travieso, (PD) La disidencia o lo que casi
todos los cubanos conocen como Movimiento de Derechos Humanos, es en la
actualidad, la principal oposición a esa cosa sin posibilidades de
reanimación a la que aun solo por conveniencia –o por costumbre- siguen
llamando la revolución.

Ha sido muy larga la lucha, muchos los sacrificios, el dolor y la
espera. Y sus resultados solo los ha visto una ínfima parte de los cubanos.

Este movimiento es la continuidad de la lucha armada que poco tiempo
después del triunfo contra el Batistato, fue librada por los que se
sintieron traicionados por el rumbo comunista que tomó el régimen
revolucionario. Aquellos hombres y mujeres, con muy poco apoyo, fueron
combatidos a sangre y fuego. Aquel enfrentamiento de cubanos contra
cubanos, costó miles de muertos, heridos, mutilados, encarcelados y
exiliados, todos hijos de un mismo pueblo.

En aquel entonces, aquellos hermanos nuestros permanecieron casi solos,
pues la mayoría del pueblo no conocía con certeza sus razones. Pero
ellos sí. Estaban convencidos de lo que a Cuba se le vendría encima. La
mayoría de los cubanos de aquel entonces no supo apoyarlos. Al
contrario, los combatió. ¡Esa es la realidad!

Aquellos hombres y mujeres, en su gran mayoría, no eran intelectuales o
académicos: eran luchadores por la libertad.

Hoy día todo es muy distinto. El pueblo cubano está cansado con este más
de lo mismo: un régimen caduco que ya no tiene qué ofrecer, pero que
contra nuestra voluntad, continúa martirizándonos con sus machaconas
consignas y sus poco creíbles planes.

Se acabaron las esperanzas. Es muy difícil seguir soportando. Pero hay
una gran dificultad: los opositores no hemos sabido llegar a ese pueblo,
no hemos sabido relacionarnos con él.

Desde que surgió en 1976 y hasta el presente, el movimiento opositor
siempre ha confrontado, desavenencias internas. Así, los opositores,
además de enfrentar al régimen, en oportunidades se han enfrentado entre
ellos.

Han existido los asiduos visitantes de sedes diplomáticas. Si tienen la
posibilidad, van cinco veces a la semana. Y no pueden faltar los
huele-huele de los Estados Unidos. ¡Como hemos conocido casos que luego
se arrepienten públicamente y reniegan de los norteamericanos! Y todavía
quedan en la actualidad algunos otros huele-huele, muy amigos de los
huele-huele renegados.

Están también los que se hacen llamar líderes, pero casi no tienen
seguidores. No obstante, cada cierto tiempo crean expectativas en los
medios y envuelven a unos cuantos. Se aprovechan de otras organizaciones
para llevar adelante sus proyectos y conseguir los recursos o medios
aportados por amigos para realizar un trabajo que casi nunca se ve o se
ve muy poco. Ellos son los encargados de administrar y utilizar esos
recursos. El proyecto muere y surge otro proyecto más. Y así sucesivamente.

Otros son los opositores complacientes con el régimen. Hay algunos mal
llamados líderes que se empavonan con esa mierda.

Los más recientes son los académicos, los más cultos, los mejor
preparados. Los que pretenden por ahora solo teorizar, y cuando llegue
el final del desastre nacional, darse la lengüita con los designados por
la familia real. Y aquí paz y en el cielo gloria.

Estos que piensan en darse la lengüita, no son partidarios de apoyar a
las Damas de Blanco y a los activistas y periodistas independientes que
acuden cada domingo al parque Gandhi de Miramar. Ellos hacen labor
proselitista contra las Damas de Blanco y otros movimientos civilistas.

¿Habrá muerto recién nacida la Asamblea Constituyente que algunos
pedían? ¿Qué pasó con las firmas?

¿Por qué no se vincularon los cubanos de fuera con los de dentro de Cuba
para llevar adelante entre todos el proyecto de la asamblea
constituyente, como se había propuesto en los inicios dentro del Comité
Gestor del proyecto?

¿Qué se hizo con las propuestas de las verdaderas mesas de diálogo, las
verdaderas, no las de mentiras. Hay ejemplos, como la realizada por la
Convergencia Liberal Cubana. Hay hasta videos incluso que lo muestran.

¿Qué resolvió la comitiva que viajó a la Florida Internacional
University (FIU), de Miami, a la mesa de diálogo?

Nació recientemente otro proyecto más que lleva por nombre MUA D Otro
18. ¡Qué malo! Los más viejos es posible no podamos asistir en el 2018
al cumpleaños de MUAD. Tal vez para entonces ya nos llegó la muerte.

Los que están casi más tiempo fuera de Cuba que en ella, ¿aportan algo
para el bien de la nación?

Concentrémonos en lo realmente importante.

Cuba requiere una ley de amnistía para todos los encarcelados por causas
políticas.

Para la crisis en que se encuentra nuestro país, no podrá haber ninguna
solución mientras continúe la excluyente Constitución socialista. Es
imprescindible una nueva constitución, donde todos los cubanos quepan,
una constitución no ideológica, como la soñó Martí. Esto debería ser una
exigencia de todos. Tenemos derecho a una ley de leyes para todos.

Los primeros opositores, sin ningún apoyo, tuvieron la visión y el valor
de enfrentarse al régimen, cuando la inmensa mayoría de los cubanos
tenía esperanza en que podría haber un futuro mejor. Hoy que no hay con
este sistema futuro alguno, compenetrémonos con el pueblo sufrido y sin
esperanzas. ¡Que acabe ya la pesadilla!

rogeliot@nauta.cu; Rogelio Travieso Pérez

Source: Los que mandan no tienen qué ofrecer | Primavera Digital -
http://primaveradigital.net/los-que-mandan-no-tienen-que-ofrecer/

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