Jueves, 15 de Marzo de 2012 15:45
José Antonio Fornaris
misa-chavezCuba actualidad, Managua, La Habana, (PD) El domingo 4 de
marzo, en la Catedral habanera, se efectuó una misa a favor de la salud
del presidente de Venezuela, Hugo Rafael Chávez Frías. La homilía estuvo
a cargo del nuncio apostólico en Cuba, Bruno Musaró.
De acuerdo con el listado de los personajes presentes en la liturgia,
aquello era un acto político, en vez de una misa católica.
Entre otros, estaban los cancilleres de Cuba y Venezuela, Bruno
Rodríguez y Nicolás Maduro, respectivamente, el historiador oficialista
Eusebio Leal, y Caridad Diego, integrante del Comité Central del Partido
Comunista. Además estaban presentes también, el cardenal-camarada Jaime
Ortega, y familiares de Chávez y de los "Cinco Héroes" (dos
estadounidenses y los tres cubanos condenados en Estados Unidos por
espionaje).
Al concluir la misa, de acuerdo a lo informado en los medios
gubernamentales, Nicolás Maduro, agradeció a las autoridades religiosas
el evento, "al tiempo que destacó la solidaridad internacional y las
muestras de apoyo a Chávez"
Esas no son cuestiones religiosas, son políticas. De todas formas, tal
vez pensando que esas oraciones era probable que no llegaran al cielo,
dos días después, el martes 6, en la Casa del ALBA Cultural -quizás lo
pagano de más resultado-, se efectuó una cantata por la recuperación de
Chávez.
En estos últimos tiempos, dos cubanos han muerto en huelga de hambre
solicitando la restitución de sus derechos conculcados, y la iglesia no
hizo ninguna misa por la vida de esos dos hombres.
Claro, que esa actitud no es novedosa. Cuando Fidel Castro enfermó, el
cardenal Ortega casi de inmediato ofició una misa por su recuperación y
solicitó a todos los feligreses en la isla que rezaran por la salud del
gobernante.
En esos momentos, Gustavo Arcos Bergnes, quien estuvo con Castro en el
asalto al Cuartel Moncada en 1953, fue Secretario General del Comité
Cubano Pro Derechos Humanos y era un católico practicante, estaba muy
enfermo. Poco tiempo después murió, y el cardenal no realizó una misa
para pedir por su salud.
Durante mucho tiempo se ha dicho en Cuba, que durante la época colonial,
la Iglesia católica estuvo siempre al lado de los gobernantes. En cuanto
a la etapa republicana, el propio Fidel Castro ha dicho, que durante ese
tiempo la iglesia estaba del lado de los poderosos.
Ahora hay un poco de confusión, porque mientras la jerarquía católica
dice que la función de la iglesia es pastoral, se le ve inmiscuida en
asuntos políticos con un poco de gravitación hacia la cúpula del poder
político. Se recibe la impresión de que la máxima cristiana de "dar al
César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios", no se pone en
práctica o es desobedecida. O lo que es lo mismo: que la iglesia
católica en la isla está paulatinamente alejándose del rebaño y
poniéndose al lado de los amos.
Para Cuba actualidad: fornarisjo@yahoo.com
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